Ajuste de cuentas
-Hola, soy Julián Ibáñez. Voy a contarte lo que pasó, que para
eso has venido.
-Encantado Julián. Soy Melchor.
-Melchor, ¡quita esos putos papeles de la mesa, no me jodas!
- Disculpa Julián, los guardo y luego firmas, tranquilo.
- Gracias. Bueno, pues todo empezó con un robo. Mi socio
escapó con el botín, a mí me pillaron y pasé un tiempo en chirona. Cuando salí,
quise recuperar mi parte y ajustar cuentas. Di con él, el muy cabrón, había
montado un puticlub y le iba que te cagas.
- ¿Necesitas agua, Julián?
- No, tranquilo tío. El caso es que fui al club, era pronto,
solo estaban el camarero y las chicas. Pregunté al camarero por el jefe, pero el
tipo no soltaba prenda, hasta que le enseñé la pipa. Cantó echando hostias, me dijo
que estaba arriba, en su oficina.
Subí y entré al despacho, sin llamar.
- ¿Él ya tenía su pistola, Julián?
- No, la guardaba en la caja fuerte. Tras abrirla, se giró
apuntándome, pero yo fui más rápido, disparé tres veces y lo dejé seco. Me
acerqué a la caja, miré dentro y allí había más papeles que en la casa de
Bárcenas, tío. No podía ser …papeles no.
- ¿Y eso Julián?
- ¡Tengo papirofobia, joder! Empecé a registrar, pero mis músculos
no respondían, vinieron las náuseas y los temblores. Total, que no conseguí encontrar
los diamantes, la pasma llegó primero.
Me han caído 20 años y un día.
Fobia : Papirofobia
Tamaño del texto : 246 palabras
Excelente escenario y personajes. Vaya que tner una fobia como que impide vivir normalmente, pero en la profesion de Julian parece que es muy importante no padecerla. Relato muy divertido.
ResponderEliminarGracias Jose por pasarte por aquí . Pues la verdad es que la fobia se las trae, imagínate a nosotros con lo que nos gusta leer y escribir, seria también desesperante.
Eliminar¡Hola, Pedro! Lo primero es agradecerte tu participación en este reto, y visto el micro que aportas sin duda le tenemos que agradecer a tu esposa que te haya animado a escribir.
ResponderEliminarUn micro divertido, narrado en forma de diálogos muy naturales y frescos y con una fobia que para un ladrón desde luego que es una condena, ja, ja, ja... ¿Se extenderá esa papirofobia a los billetes? Un abrazo!
Gracias David , la verdad es que me he sentido muy bien recibido por ti y por todos los compañeros, cosa que os agradezco a todos. En cuanto a los billetes imagínate el lio, ja ja ja. Un saludo.
EliminarHola, Pedro. Bienvenido! Me encantó el micro, lleno de humor y picardía. Los diálogos muy naturales. Muy bueno
ResponderEliminarUn abrazo
Gracias por tu lectura y comentario Mirna , y gracias también por el buen recibimiento que he tenido por parte de todos vosotros. Un saludo.
EliminarMuy bueno el apunte de David... los billetes también son de papel...
ResponderEliminarUn relato hecho con diálogos solamente, es una de las pruebas de algunos retos. Muy bien llevado. ¡Bienvenido!
Gracias MJ a todos vosotros por la magnifica acogida. En cuanto a los billetes la verdad es que es el colmo del ladrón, como aquel viejo chiste del pastelero que tenia una hija llamada Magdalena( bufff , además de viejo, que malo era.. jajaja). Un saludo.
Eliminar¡Bienvenido a este espacio, Pedro!, seguros que te encontrarás a gusto, hay un montón de propuestas diferentes de las que todos podemos aprender.
ResponderEliminarEn cuanto a la fobia de tu sujeto, pues no se como va a firmar la condicional, si lo sueltan.
Destaco el lenguaje coloquial, parece que se escucha en vez de leer. Me ha gustado mucho, compañero
Muchas gracias Tara. La verdad , es que os he estado leyendo a todos y créeme que puedo aprender mucho de vosotros, porque he leído cosas muy buenas. Eso si, siempre que pueda sacar tiempo para escribir , que a veces es lo mas complicado. Un saludo.
Eliminar¡Bienvenido Pedro! te ha quedado un muy buen micro sobre una fobia que para el ladrón resultó ser fatal. ¡Excelente! Te comento que en esta página todos tratamos de leer y comentar los textos de los compañeros. Un gusto conocer tu espacio. Saludos.
ResponderEliminarMuchas gracias Ana por tu comentario. Pues ya he estado viendo un poco la dinámica y me parece fenomenal como lo hacéis. Un saludo y gracias de nuevo.
EliminarHola, Pedro. Que faena pera este ladrón, solo puede robar joyas con los billetes no podría ni aunque le ofrecieran robar en la casa de la moneda. 🖐
ResponderEliminarHola JM. Muchas gracias por tu comentario. La verdad es que hizo el casting para la casa de papel , pero no paso la primera prueba el pobre...jeje. Un saludo y gracias de nuevo.
EliminarHola, Pedro. También a mí me ha gustado mucho tu micro. Inesperado y muy divertido ese final. Bienvenido al Tintero.
ResponderEliminarHola Marta, muchas gracias a vosotros por la estupenda acogida y a ver si podemos leernos en mas retos en el futuro. Un saludo.
EliminarHola, Pedro. No te conocía, así que bienvenido al mundo de la escritura. Yo llevo aprendiendo a escribir unos meses. Te felicito por tu micro, aunque esa fobia es una ventaja, el personaje nunca tendrá una hipoteca. Ja, ja, ja. Joder, tampoco puede casarse, menudo chollo. Un abrazo.
ResponderEliminarHola RR. Soy nuevo por aquí, y como he dicho en otros comentarios gracias por el recibimiento. En cuanto a tus incisos sobre la hipoteca y el matrimonio , creo que ahí tenemos material para escribir otro relato sobre la papirofobia, y quedaría muy divertido jaja.
EliminarUn saludo.
Hola, Pedro. Lo primero a destacar es el relato completamente dialogado salvo dos líneas en las que el narrador es él mismo, por eso el lenguaje resulta natural. En cuanto a la fobia, mala suerte, y eso que lo robado eran diamantes y no moneda en papel que ya tuvo cuidado en elegir la mercancía. Hasta el próximo reto.
ResponderEliminarHola Isan, gracias por tu comentario. Por aquí estamos, a ver si nos podemos leer muchas veces y a mi se me pega algo de vosotros. Un saludo y gracias.
EliminarHola, Pedro. ¡Qué fobia más inoportuna! Me ha gustado la trama y la desenvoltura con la que has creado una situación, con un lenguaje muy fluido. ¡Me ha gustado, felicidades! Un saludo desde la Buhardilla de Tristán.
ResponderEliminarHola Javier, muchas gracias por pasarte. Espero que podamos leernos muchas veces, eso será señal de que podemos seguir dando rienda suelta a la imaginación. Un saludo y gracias de nuevo.
EliminarHola Pedro, toda una vasta historia resumida en pocas palabras, y una inoportuna fobia, que termina con el prota en el talego, pues menuda putada, después de toda la peripecia. Muy buen micro, saludos y un abrazo¡¡¡
ResponderEliminarMuchas gracias por tu comentario Mik. Como dices, inoportuna fobia para un ladrón, la verdad. Gracias también por pasarte por aquí espero leerte en el próximo reto. Un saludo .
EliminarHola Pedro. ¡Pues sí que tiene mala suerte el tal Julián! Debería haberse echado un socio sin fobia a los papeles antes de intentar ajustar cuentas.
ResponderEliminarUn buen relato. Un saludo.
Hola Bruno. Muchas gracias por el comentario. Espero que nos leamos de aquí en adelante y en mi caso poder aprender de vosotros, aunque sea un poquito. Gracias y un saludo.
EliminarHola, Pedro. No te había leído nunca. Vaya fobia más rara esa de la papilofobia. Me da a mí que es de las peores y un alivio para el tal julián la era digital, qué si no...
ResponderEliminarMuy bueno, me encantan los relatos a golpe de diálogo.
Un saludo!
Hola Pepe. Soy nuevo por aquí, y la verdad es que me habéis recibido fenomenal. A mi últimamente también me gustan los diálogos, antes no me fijaba demasiado en ellos pero ahora los veo de otra manera. Un saludo y gracias por tu comentario.
EliminarEn este caso por culpa de una mala fobia se aumento la condena. Bueno también de la mala cabeza del protagonista.
ResponderEliminarHola Francisco. Muchas gracias por pasarte. La verdad es que "casi" siempre , quien la hace la paga. Espero que nos podamos leer mas veces. Gracias y un saludo.
EliminarUn ladrón un poco delicado. Mejor que se dedique a otra cosa.
ResponderEliminarTe ha quedado un relato muy dinámico y divertido.
Un saludo y con tu permiso me quedo leyendo por aquí.
Hola Ángel , muchas gracias por tu lectura. Pues si , mal negocio para un ladrón, debería cambiar de oficio pero tendrá que esperar un tiempo a la sombra. Espero leerte en mas ocasiones y de nuevo darte las gracias. Un saludo.
EliminarHola, y bienvenido!
ResponderEliminarMuy bien planteada la trama con esa fobia que la verdad debe ser una pesadilla para este ladrón. Pero menos mal que estamos en la era digital, algo se le ha de ocurrir para el siguiente asalto.
Un saludo
Hola Yessy, como he comentado ya, muchas gracias a vosotros. Pues para el siguiente asalto , tendrá que estudiar informática en la cárcel y dedicarse al bitcoin, jeje. Espero leerte más veces. Gracias de nuevo y un saludo.
EliminarGreat article and have a nice day
ResponderEliminarHola Pedro. Si que le salió cara su fobia a Julián! Muy buen relato, contado con un lenguaje llano y un tanto burdo, adecuado al tipo de protagonistas. Nos das una pista sobre la fobia al principio, cuando Julián exige a Melchor que retire los papeles, que se clarifica con ese final. Muy bueno. Un saludo.
ResponderEliminarHola Jorge, muchas gracias por tu comentario. Si , deje la pista al principio con toda la intención jeje. Muchas gracias. Espero leerte mas veces. Un saludo.
EliminarHola Pedro, qué bueno que hayas llegado a este grupo de escritores, y aspirantes a serlo... Pero más que todo, a ese grupo de bellos seres humanos y compañeros de tertulias literarias que son.
ResponderEliminarLlevo un tiempo de polizón por aquí intentando aprender de ellos, en especial del jefe David, un amor de persona. Como polizón no me siento con derecho de darte la bienvenida, pero si puedo augurar una muy buena estadía, son geniales...
El micro con el que te estrenas dice mucho ya de lo bien que escribes, te ha quedado muy visual, ha sido un excelente cortometraje. Además un micro policiaco o delictivo, con lo que gusta la mayoría de esos temas, es una premonición, ja, ja.
Sobre la fobia en realidad, me parece que se trata más bien del papel de escribir, ya sea liso o estrujado, quizás debido al alguna mala experiencia de niño en la escuela, cortarse el dedo con una hoja, asustarse con el sonido que hace el arrugarlo, en fin..., si fuera con todo tipo de papel, habría problemas muy serios con el papel sanitario, ja, ja.
Que disfrutes del Tintero.
Muchas gracias por tu comentario, me has sacado los colores je je. Ratifico todo lo dicho por ti sobre el Jefe y el grupo de personas que forman parte del tintero. Son espectaculares , de verdad, una maravilla como me han acogido y lo bien que me han tratado. Y lo mas importante, es que además se ve que son muy buena gente todos. Nos iremos leyendo Harolina. Un saludo y gracias.
ResponderEliminarHola Pedro , ya es mala pata la del protagonista, pasar todo esto para al final solo encontrar papeles sabiendo lo de su fobia .
ResponderEliminarMuy bien narrada toda la historia, con un lenguaje llano y sencillo .
Creo que eres nuevo en el tintero, un placer leerte
Un abrazo
Puri
Hola Puri, pues si , soy nuevo por aquí. Muchas gracias por tu comentario y espero que nos podamos leer en muchas ocasiones. Un saludo y gracias.
ResponderEliminarUna caracterización muy buena a través de unos diálogos muy frescos. Muy bien llevada la trama con una fobia que da que pensar si no habrá equivocado oficio el protagonista.
ResponderEliminarMe ha gustado tu micro.
Un abrazo.
Muchas gracias por tu lectura Carles. Me alegro que te haya gustado. Un saludo.
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